Tortícolis (cuello torcido)
La tortícolis se produce cuando los músculos de un lado del cuello se contraen (se tensan). Esto hace que el cuello se tuerza o se incline hacia el costado. Los músculos también pueden estar muy dolorosos. Afecta principalmente a niños y adultos jóvenes, y a menudo aparece durante la noche. También puede afectar a los bebés que se desarrollan o nacen con músculos contraídos de un lado del cuello.
¿Cuáles son las causas de la tortícolis?
Las causas de la tortícolis incluyen:
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Congénita (presente al nacer). Lesión en los músculos del cuello debido a un accidente u otra lesión, o incluso simplemente dormir en una posición inusual
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Efecto secundario de determinados medicamentos o fármacos
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Problemas en los huesos del cuello (que pueden ocurrir después de una infección o lesión)
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Espasmo de los músculos debido a una infección, como un absceso en el cuello
Cuándo ir a la sala de emergencias
Un proveedor de atención médica debe controlar todos los problemas en el cuello en un plazo de 24 horas. Obtenga atención de emergencia si no puede comunicarse con su proveedor de atención médica o si tiene estos síntomas:
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Problemas para respirar o tragar, o en niños más pequeños, babeo continuo
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Entumecimiento o debilidad en los brazos y las piernas
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Problemas para caminar o hablar
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Fiebre o escalofríos.
Qué esperar en la sala de emergencias
Se le examinará el cuello y se le harán preguntas sobre cualquier problema de salud actual o pasado. Es posible que se tomen radiografías de cuello para detectar huesos rotos.
Tratamiento
El objetivo del tratamiento de la tortícolis es relajar los músculos del cuello. El mejor método dependerá de la causa del problema. En la mayoría de los casos, puede administrarse uno o más de estos:
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Medicamentos. Ayudan a relajar los músculos y reducir la hinchazón.
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Compresas calientes y frías. Ayudan a aliviar la contractura muscular.
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Inyecciones de toxina botulínica. Se realizan para prevenir un mayor espasmo muscular.
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Fisioterapia. Esto ayuda a estirar y relajar los músculos.
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Cirugía. Si el tratamiento no quirúrgico no ha sido exitoso, se puede recomendar cirugía de elongación del músculo.
Después de la sala de emergencias: Cuándo consultar al médico
Según la causa, la tortícolis suele desaparecer por sí sola. Siga las instrucciones que reciba en la sala de emergencias y haga un seguimiento con su proveedor de atención médica según se le indique. Llame a su proveedor de inmediato o regrese a la sala de emergencias si se presenta alguna de las siguientes situaciones:
Llame al 911.
Llame al 911 si presenta alguno de estos síntomas:
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Problemas para tragar o respirar.
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Piel o labios de coloración azul o gris.
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Dolor creciente o dolor intenso que no desaparece.
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Debilidad, entumecimiento u hormigueo repentinos en los brazos o las piernas.
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Pérdida del control de la vejiga o los intestinos.
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